Ascienden a 45.000 las viviendas afectadas por Melissa en Cuba, mientras el 60% del oriente sigue sin luz. Diario de Cuba.

Familias en El Sitio, Manzanillo, bajo carpas en la carretera. José Ortiz Benet/Facebook

Unas 120.000 personas permanecen evacuadas y los daños en cultivos alcanzan más de 78.000 hectáreas.

El Consejo de Defensa Nacional, presidido por Miguel Díaz-Canel, ofreció este martes nuevas cifras de daños ocasionados por el huracán Melissa en viviendas, infraestructura educativa y sanitaria, cultivos y el sistema electroenergético en el oriente cubano.

Según recogió el portal oficial Cubadebate, más de 120.000 personas continúan protegidas en centros de evacuación y hogares de vecinos y familiares, y se han contabilizado 45.282 afectaciones en viviendas —la mayoría en techos— mientras las autoridades dicen que ya se inició la entrega de tejas.

En videoconferencia con los consejos provinciales, el ministro de Energía y Minas, Vicente de la O Levy, habló del "avance" por provincias en la recuperación del servicio eléctrico: Las Tunas alcanza el 94,5%, Holguín, el 40,5% (con "islas" de generación), Granma solo llega al 50,4% mediante islas y con obras provisionales para restituir la línea de 110 kV tras la caída de torres, Santiago de Cuba sigue con muchos circuitos listos a la espera de la conexión de Renté, y Guantánamo va por el 58,7%, igualmente con islas de generación y trabajos en curso para reintegrarlas al Sistema Electroenergético Nacional (SEN).

El conteo oficial registra 339 transformadores dañados entre Las Tunas y Guantánamo.

Salud y educación y viviendas

El informe oficial del Consejo de Defensa señala que 461 instalaciones del sector de la Salud sufrieron daños —hospitales, policlínicos, consultorios y farmacias— y que la atención médica y psicológica se mantiene en los centros de evacuación.

En Educación, se contabilizan 1.552 centros escolares dañados, de los cuales cerca de 200 ya fueron recuperados; más de un centenar de escuelas siguen funcionando como centros de evacuación. La ministra Naima Trujillo Barreto dijo que el retorno a clases será asimétrico, según las condiciones de cada provincia.

La agricultura también registró pérdidas severas: 78.700 hectáreas de cultivos dañadas, más de la mitad afectadas en plantaciones de plátano, con impactos adicionales en café y otros productos en zonas montañosas.

Según los datos oficiales, más de 14.000 evacuados permanecen en instalaciones de Salud Pública, en escuelas, entre otras, y la cifra de personas protegidas supera las 120.000.

El Consejo informó que además de los donativos de naciones y organismos internacionales, cuyo monto total no precisó, se están organizando aportes de MIPYMES, instituciones y ciudadanía que serán puestos a disposición de los consejos de defensa provinciales.

Telecomunicaciones y energía: UNE y ETECSA reportan avances parciales y daños en redes

La Unión Eléctrica (UNE) señaló pasos concretos en la reactivación de la red: a las 19:00 del 3 de noviembre se informó la puesta en línea de la unidad 1 de la CTE Lidio Ramón Pérez (Felton) a las 13:34 y de la unidad 6 de la CTE Máximo Gómez a las 18:25, entre otras incidencias reportadas por la entidad.

Por su parte, la estatal ETECSA emitió una nota informativa (a las 6:00 pm del mismo lunes) sobre el estado de las comunicaciones: en Las Tunas se ha restablecido el 95% de los servicios fijos dañados y el 90% de los sitios de radiobases; en Holguín el restablecimiento llega al 22% de los servicios fijos y al 60% de las radiobases; en Granma se reporta el 74% de servicios fijos y el 51% de radiobases; en Guantánamo un 28% y 53%, respectivamente; y Santiago de Cuba figura como la provincia más afectada: solo el 3% de servicios fijos restablecidos y el 18% de radiobases operativas.

ETECSA advirtió que la falta de fluido eléctrico limita la puesta en servicio de radiobases y gabinetes y consignó afectaciones en la infraestructura física: seis torres dañadas, más de 60 cables de fibra óptica, más de 400 cables telefónicos y más de 1.000 postes afectados en la zona oriental.

Songo La Maya y otros municipios: daños localizados y emergencia prolongada

El parte municipal de Songo La Maya (provincia Santiago de Cuba) resume la devastación a escala local: 852 viviendas afectadas —75 derrumbes totales, 383 derrumbes parciales, 57 techos destruidos en su totalidad, 294 con daños parciales en techos y otras 42 afectaciones en paredes y baños—; 43 unidades del comercio y la gastronomía dañadas; 16 instalaciones de salud con afectaciones; 36 escuelas dañadas (23 con afectaciones de techos y tres con derrumbes totales); 12 unidades de la Industria Alimentaria perjudicadas.

Además, 15 embalses colapsaron, y la caída de puentes —entre ellos Los Reynaldo y La Perla— y deslizamientos de tierra han dejado incomunicadas varias comunidades (Jutinicú, Ponupo, Sabanilla, Loma del Gato, Jarahueca, Matahambre, entre otras). La base de ómnibus municipal sufrió el derrumbe total de su taller, y terminales presentan averías estructurales.

Las autoridades municipales informan que la recuperación está en marcha —trabajos para despejar vías, restituir comunicaciones y electricidad— pero reconocen que el acceso a zonas rurales sigue siendo difícil por ríos crecidos, escombros y puentes colapsados.

Voces desde el terreno

El drama humanitario también toca a familias de presos políticos: Eliannis Villavicencio Jorge, esposa del recluso Alexander Verdecia Rodríguez, publicó imágenes de su vivienda anegada en Río Cauto, Granma, y relató que tuvo que refugiarse con sus dos hijas en una escuela cercana, bajo carpas improvisadas. Su testimonio es uno de los tantos relatos que, junto a denuncias sobre la falta de transparencia en la distribución de ayuda, alimentan la inquietud social.

En el poblado El Sitio, en el municipio de Manzanillo, Granma, varias familias permanecen viviendo bajo carpas improvisadas al borde de la carretera tras perderlo todo durante el paso del huracán Melissa y las posteriores inundaciones. Según publicó el periodista José Ortiz Benet, quien visitó la zona y documentó la situación en redes sociales, muchos de los damnificados aún buscan a familiares en otros pueblos y sobreviven en condiciones precarias, con escasez de agua potable, medicinas y alimentos.

El reportero señaló que la ayuda recibida —proveniente del Gobierno local, cubanoamericanos y MIPYMES como Bajo Cero y Casa Tres Delicias— resulta insuficiente ante la magnitud del desastre. Las imágenes compartidas muestran carpas blancas, cocinas improvisadas y pertenencias apiladas a la intemperie, retrato de lo que Ortiz Benet describió como "un dolor invisible y una miseria profunda" que persiste bajo el calor y la amenaza de los vectores.

En el sector agropecuario, los cafetaleros de Buey Arriba luchan por rescatar la cosecha: las despulpadoras y caminos dañados complican la recuperación del grano, mientras equipos locales priorizan la recolección en zonas con vías aún transitables para evitar pérdidas irreparables.

Advertencias sobre la recuperación a largo plazo

El economista Pedro Monreal advirtió desde su cuenta en X que la variable crítica para la recuperación tras huracanes en el Caribe es el nivel preexistente de resiliencia socioeconómica, medido por la pobreza y acceso a recursos financieros (ahorro, seguros, remesas y mecanismos de transferencias rápidas).

Monreal recordó evidencia empírica de eventos recientes: hogares bajo la línea de pobreza suelen carecer de capacidad para financiar reparaciones, y en casos como Puerto Rico tras María o en República Dominicana, la ausencia de aseguramiento y recursos condujo a retrocesos prolongados en los niveles de vida.

El analista citó estudios que muestran que por cada 10% menor del índice de pobreza se acorta la demora en la recuperación del PIB per cápita en el Caribe, advirtiendo que el empobrecimiento previo y la limitada protección financiera en Cuba podrían convertir la crisis actual en un retroceso socioeconómico multisecular para amplios sectores.