Es una realidad la gravedad de la coinfección por arbovirus en Cuba. La situación en la ciudad costera de Caibarién, VC. Recopilación y texto: Dr. Eloy A Gonzalez.
¿Estamos en presencia de una epidemia de coinfección por arbovirus en Cuba?
Recopilación y texto: Dr. Eloy A Gonzalez.- [15 de noviembre de 2025]-
La situación sanitaria en Cuba enfrenta una realidad apabullante.
Dr. Eloy A Gonzalez.- /2025/11/- La circulación simultánea de múltiples arbovirus —incluyendo Dengue, Oropouche, Chikungunya y la posible amenaza de Zika— ha generado un escenario epidemiológico altamente complejo.
La coinfección, donde un paciente padece más de un virus a la vez, ya es una posibilidad clínica y epidemiológica real, especialmente en provincias occidentales como Matanzas, Camagüey y Villa Clara. La Organización Panamericana de la Salud (OPS) advierte que la circulación simultánea de estos patógenos incrementa significativamente el riesgo de complicaciones, hospitalizaciones y mortalidad en poblaciones vulnerables.
El deterioro estructural del país es el principal aliado de la epidemia. La combinación de lluvias, calor, acumulación de basura y una deficiente fumigación ha provocado la proliferación descontrolada de vectores como el Aedes aegypti (Dengue/Zika/Chikungunya), Culex quinquefasciatus y Culicoides paraensis (Oropouche).
El problema va más allá de un brote cíclico. La crisis exige una mirada ética y sensible que entienda la coinfección no como un hecho aislado, sino como una emergencia epidemiológica que evidencia la incapacidad del sistema de salud y las autoridades locales para garantizar condiciones sanitarias mínimas.
La Cruda Realidad en Caibarién: Un Testimonio Anónimo y Urgente
El rostro de esta crisis se refleja con dramática claridad en la ciudad costera de Caibarién, provincia de Villa Clara, una de las zonas con mayor focalidad de arbovirus. Para evitar represalias del régimen, un ciudadano ha hecho llegar un testimonio anónimo que revela la gravedad del problema:
He señalado la realidad apabullante de la presencia en Cuba de infecciones por virus que comprometen una buena parte de la población en Cuba. La epidemia actual de arbovirus en Cuba —que involucra dengue, Oropouche, chikungunya y posiblemente Zika— ha generado un escenario complejo donde la coinfección múltiple se vuelve una posibilidad clínica y epidemiológica real, especialmente en provincias como Matanzas, Camagüey y otras del occidente del país.
La OPS advierte que la circulación simultánea de varios arbovirus puede aumentar el riesgo de complicaciones, hospitalizaciones y mortalidad en poblaciones vulnerables. Las lluvias, el calor, la acumulación de basura y la deficiente fumigación han favorecido la proliferación de vectores como Aedes aegypti, Culex quinquefasciatus y Culicoides paraensis, todos capaces de transmitir estos virus.
Nada como las informaciones que parten de personas que —a título personal— denuncian el creciente deterioro de la salud en Cuba. La epidemia requiere una mirada ética, sensible y contextualizada. Las autoridades y el sistema nacional de salud en Cuba deben asumir el reto de comprender la coinfección no como un hecho aislado, sino como una emergencia epidemiológica. Documentar, investigar y divulgar estos casos será clave para preservar la memoria clínica y fortalecer la respuesta sanitaria. Pero sobre todo no faltar a la verdad científica, lo que en este caso significa poner en riesgo a la población.
Rogamos enfáticamente mantener un discurso profesional, centrado en el análisis de datos y la evidencia clínica. Todo esto en consonancia con los valores de la verdad científica y la dedicación a proveer los mecanismos para mejorar la salud del pueblo ya víctima de un régimen que ha llevado al país a una situación de estado fallido en calamidad pública.
La información que comparto a continuación refleja la situación en una ciudad en particular en el centro de la isla; me refiero a Caibarién, ciudad costera de la provincia de Villa Clara. Este es el testimonio de un ciudadano que hace un reporte anónimo, para evitar represalias del régimen, pero que demuestra la gravedad del problema de salud, que ya es una realidad en varias provincias del país. Dice el testimoniante:
¡Urgente, Caibarién muere, denuncia y comparte!
“….. Hola, amigo, era para informarles una situación que hay creada en Caibarién VC, donde vive mi familia. Está esta pandemia que hay ahora, acabando en el pueblo. El Hospital General Docente “María del Carmen Zozaya” en Caibarién está colapsado y las salas llenas de casos. No hay dónde ingresar a las personas.
Hay negocios pequeños de 2 o 3 trabajadores que han tenido que cerrar porque los trabajadores están enfermos, sin poderse levantar de las camas. Esta pandemia se ha llevado a varios habitantes del pueblo; en tres ocasiones han tenido que asistir los Cuerpos de Bomberos para romper las puertas y para poder sacar cadáveres de personas que han muerto solas.
En el reparto Van Troi hay edificios en los que están todos los vecinos enfermos. En el pueblo las autoridades no hacen nada, es un abandono total. En todas las esquinas del pueblo son lomas de basuras que ocupan toda la calle y las fosas invaden las calles y portales. Este pueblo es un caos total, las personas sin solución a todas las enfermedades y suciedad.
El pueblo está como para cerrarlo por pandemia; todo es una locura. Les hago saber todo esto porque usted tiene muchos seguidores y las familias están preocupadas por sus familiares en Caibarién. Saludos y buenos días…”
Fuente: Nio reportando.
Publicado en la página MedicinaCubana,/2025/11/es-una-realidad-la-gravedad-de-la.html
#SOSCuba #Caibarien #Arbovirus #Dengue #CrisisSanitaria #CubaLibre#CubaEstado Fallido,
eloy_gnzlz@yahoo.com
Recopilación y texto: Dr. Eloy A Gonzalez.- [15 de noviembre de 2025]-
La situación sanitaria en Cuba enfrenta una realidad apabullante.
Dr. Eloy A Gonzalez.- /2025/11/- La circulación simultánea de múltiples arbovirus —incluyendo Dengue, Oropouche, Chikungunya y la posible amenaza de Zika— ha generado un escenario epidemiológico altamente complejo.
La coinfección, donde un paciente padece más de un virus a la vez, ya es una posibilidad clínica y epidemiológica real, especialmente en provincias occidentales como Matanzas, Camagüey y Villa Clara. La Organización Panamericana de la Salud (OPS) advierte que la circulación simultánea de estos patógenos incrementa significativamente el riesgo de complicaciones, hospitalizaciones y mortalidad en poblaciones vulnerables.
El deterioro estructural del país es el principal aliado de la epidemia. La combinación de lluvias, calor, acumulación de basura y una deficiente fumigación ha provocado la proliferación descontrolada de vectores como el Aedes aegypti (Dengue/Zika/Chikungunya), Culex quinquefasciatus y Culicoides paraensis (Oropouche).
El problema va más allá de un brote cíclico. La crisis exige una mirada ética y sensible que entienda la coinfección no como un hecho aislado, sino como una emergencia epidemiológica que evidencia la incapacidad del sistema de salud y las autoridades locales para garantizar condiciones sanitarias mínimas.
La Cruda Realidad en Caibarién: Un Testimonio Anónimo y Urgente
El rostro de esta crisis se refleja con dramática claridad en la ciudad costera de Caibarién, provincia de Villa Clara, una de las zonas con mayor focalidad de arbovirus. Para evitar represalias del régimen, un ciudadano ha hecho llegar un testimonio anónimo que revela la gravedad del problema:
He señalado la realidad apabullante de la presencia en Cuba de infecciones por virus que comprometen una buena parte de la población en Cuba. La epidemia actual de arbovirus en Cuba —que involucra dengue, Oropouche, chikungunya y posiblemente Zika— ha generado un escenario complejo donde la coinfección múltiple se vuelve una posibilidad clínica y epidemiológica real, especialmente en provincias como Matanzas, Camagüey y otras del occidente del país.
La OPS advierte que la circulación simultánea de varios arbovirus puede aumentar el riesgo de complicaciones, hospitalizaciones y mortalidad en poblaciones vulnerables. Las lluvias, el calor, la acumulación de basura y la deficiente fumigación han favorecido la proliferación de vectores como Aedes aegypti, Culex quinquefasciatus y Culicoides paraensis, todos capaces de transmitir estos virus.
Nada como las informaciones que parten de personas que —a título personal— denuncian el creciente deterioro de la salud en Cuba. La epidemia requiere una mirada ética, sensible y contextualizada. Las autoridades y el sistema nacional de salud en Cuba deben asumir el reto de comprender la coinfección no como un hecho aislado, sino como una emergencia epidemiológica. Documentar, investigar y divulgar estos casos será clave para preservar la memoria clínica y fortalecer la respuesta sanitaria. Pero sobre todo no faltar a la verdad científica, lo que en este caso significa poner en riesgo a la población.
Rogamos enfáticamente mantener un discurso profesional, centrado en el análisis de datos y la evidencia clínica. Todo esto en consonancia con los valores de la verdad científica y la dedicación a proveer los mecanismos para mejorar la salud del pueblo ya víctima de un régimen que ha llevado al país a una situación de estado fallido en calamidad pública.
La información que comparto a continuación refleja la situación en una ciudad en particular en el centro de la isla; me refiero a Caibarién, ciudad costera de la provincia de Villa Clara. Este es el testimonio de un ciudadano que hace un reporte anónimo, para evitar represalias del régimen, pero que demuestra la gravedad del problema de salud, que ya es una realidad en varias provincias del país. Dice el testimoniante:
¡Urgente, Caibarién muere, denuncia y comparte!
“….. Hola, amigo, era para informarles una situación que hay creada en Caibarién VC, donde vive mi familia. Está esta pandemia que hay ahora, acabando en el pueblo. El Hospital General Docente “María del Carmen Zozaya” en Caibarién está colapsado y las salas llenas de casos. No hay dónde ingresar a las personas.
Hay negocios pequeños de 2 o 3 trabajadores que han tenido que cerrar porque los trabajadores están enfermos, sin poderse levantar de las camas. Esta pandemia se ha llevado a varios habitantes del pueblo; en tres ocasiones han tenido que asistir los Cuerpos de Bomberos para romper las puertas y para poder sacar cadáveres de personas que han muerto solas.
En el reparto Van Troi hay edificios en los que están todos los vecinos enfermos. En el pueblo las autoridades no hacen nada, es un abandono total. En todas las esquinas del pueblo son lomas de basuras que ocupan toda la calle y las fosas invaden las calles y portales. Este pueblo es un caos total, las personas sin solución a todas las enfermedades y suciedad.
El pueblo está como para cerrarlo por pandemia; todo es una locura. Les hago saber todo esto porque usted tiene muchos seguidores y las familias están preocupadas por sus familiares en Caibarién. Saludos y buenos días…”
Fuente: Nio reportando.
Publicado en la página MedicinaCubana,/2025/11/es-una-realidad-la-gravedad-de-la.html
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eloy_gnzlz@yahoo.com 
